La Sociedad de la Información


Porwilliammoura- Postado em 29 novembro 2012

La Sociedad de la Información

 
Abstract: 
Sumilla: 1. La Evolución Tecnológica y social; 2. Noción de la Sociedad de la Información, 3. Nuevo rol del derecho en la sociedad de la información; 4. La brecha digital en la Latinoamérica. 5. Políticas internacionales en torno a la sociedad de la información. 6. Conclusiones

1.      La Evolución Tecnológica y social

Según Alvin Toffler en su libro: La Tercera Ola, la historia de la humanidad se puede dividir en tres etapas a las que denomina "olas". La primera "ola" corresponde a la utilización de la agricultura, cuando las primitivas sociedades dejan de ser nómadas y se crea un orden social teniendo como principal actividad la agricultura. En la segunda ola se produce  el cambio de la sociedad  agrícola a la sociedad industrial, conocida como la primera revolución industrial que  puede ubicarse entre fines del siglo XIX y principios del XX, y la tercera "ola", que corresponde al tiempo actual, caracterizada por el desarrollo y empleo de las tecnologías de la información y comunicaciones(TIC).

Los primeros pasos hacia una Sociedad de la Información se remontan a la invención del telégrafo eléctrico, pasando posteriormente por el teléfono fijo, la radiotelefonía, la televisión, la telecomunicación móvil y el GPS pero indudablemente es la aparición de Internet lo que dio impulso al desarrollo de la sociedad de la información, convirtiéndose esta en una herramienta tecnológica indispensable para  administrar, transmitirla y controlar la información.

La evolución tecnológica comprende los avances científicos que se han venido produciendo a lo largo del tiempo no sólo en este campo de la informática sino en materia de los conocimientos científicos en general. Pero es sin duda el campo de la informática, la que está teniendo mayor relevancia en el quehacer jurídico, principalmente en materia comercial.

La convergencia tecnológica entre telecomunicaciones y computadores revoluciona la forma de hacer negocios, de adquirir conocimientos y en general sugiere la aparición de la sociedad de la información. Nuevas funciones de los agentes económicos, maneras de intermediación basadas en reglas diferentes a las tradicionales y una interacción aún impredecible entre máquinas "inteligentes" e individuos son las características de esta sociedad que se vislumbra[i].  

De este proceso en constante progresión, es de notar que las nuevas tecnologías surgen de la mano de las necesidades sociales, de tal modo que cabe afirmar que existe un auténtico proceso de interrelación entre ambos campos: el tecnológico y el social[ii].

 

2.      Noción de la Sociedad de la Información

Es indudable que, el desarrollo de las nuevas tecnologías y la electrónica han revolucionado la sociedad, con cambios que involucran un nuevo concepto del manejo de la información, la comunicación y el comercio.

Es así que, la extensión generalizada de estas innovaciones tecnológicas informáticas y de las telecomunicaciones han generado cambios económicos y sociales importantes, traspasando fronteras entre los países y generando lo que se ha denominado la sociedad de la información[iii] y contribuyendo, en parte y sin duda, a lo que es en la actualidad el fenómeno de la globalización[iv]. En estos tiempos no cabe duda que la informática ha adquirido una importancia decisiva, no sólo en el mundo especializado de la ingeniería de sistemas o informática, sino en la vida cotidiana de cada individuo. Pues, hoy en día, resulta más frecuente el uso de herramientas informáticas[v] para la recopilación de información y en general para la comunicación.

Uno de los mayores investigadores sobre este tema es Manuel Castells, quien prefiere utilizar el termino "sociedad informacional" antes que "sociedad de la información" para determinar a una nueva organización social en la que la generación, el procesamiento y la transmisión de información se convierten en las fuentes fundamentales de la productividad y el poder, debido a las nuevas condiciones tecnológicas que surgen en este período histórico[vi]

Otros estudiosos sobre la materia como Gomez Segade, señala que "la sociedad de la información se asienta, en primer término, sobre la convergencia de instrumentos y medios técnicos suficientemente conocidos y útiles socialmente, como el sistema telefónico, la radiodifusión, los satélites de comunicaciones, las bibliotecas o las bases de datos accesibles a distancia (...) el segundo pilar sobre el que se asienta la sociedad de la información son las nuevas tecnologías, en particular la informática y las telecomunicaciones, junto con otras técnicas como la comprensión de datos o el encriptado"[vii].

Por su parte, Plaza Penadés, citado por Moro Almaraz, nos dice que la sociedad de la información es el resultado de una autentica revolución tecnológica provocada durante la década de los 90 por el desarrollo de la informática  y los medios de telecomunicación, y la progresiva generalización del uso y utilización del ordenador  personal y de Internet por empresas y particulares. Ello ha permitido el acceso a la información y servicios de cualquier parte del mundo, a bajo coste, en cualquier momento y que sea posible la intercomunicación entre grupos  y sujetos. La generalización del uso de Internet y del desarrollo imparable de la tecnología  digital que procura una ágil transmisión y almacenamiento de gran volumen de datos  de todo  tipo caracterizan esta etapa en la que, primero por medios informáticos y poco a poco a través de la telefonía, los medios de comunicación tradicionales, y la comunicación de funciones, determinan el contexto de la calificación de los servicios por los que nos preguntamos y de sus sujetos[viii].

De igual forma nos dice  López-Amonís que "La sociedad de la información es aquella en la que existe un cierto grado de generalización en el empleo de equipos y aplicaciones electrónicas, en el procedimiento automatizado de datos y en las comunicaciones temáticas"[ix].

Como bien señala Guisado Moreno[x], la sociedad de la información (expresión acuñada por las normas de nueva hornada disciplinadoras del comercio electrónico) viene a ser el contexto donde generalmente se desenvuelven el moderno comercio electrónico y, más ampliamente, los genéricamente denominados "servicios de la sociedad de la información[xi]".

Por nuestra parte, podemos decir que la sociedad de la información es  concebida como un motor de nuevos cambios, aquella que se apoya en las nuevas tecnologías; ya que surge como resultado del avance tecnológico de las telecomunicaciones y la informática, tales como el empleo de equipos y programas informáticos y la utilización de la red de redes, Internet. Pero ténganse en cuenta que la sociedad de la información no está limitada al Internet, aunque sin duda, este ha desempeñado un papel muy importante como un medio que facilita el acceso e intercambio de información y datos.

 

3.      Nuevo rol del derecho en la sociedad de la información

La incorporación de las TI  a la vida económica y social supone una serie de ventajas, como por ejemplo, mayor y mejor información al alcance de todos, mayores transacciones económicas, un consiguiente aumento en la economía y por lo tanto una mejora en la calidad de vida de las personas. No obstante eso la incorporación de estas nuevas técnicas en la contratación también origina incertidumbres en el mundo jurídico.

Esta nueva sociedad de la información introduce, una serie de peculiaridades y algunos problemas jurídicos, tecnológicos y sociales, derivados de la utilización de los medios electrónicos. Estos problemas suscitados, se han ido resolviendo a lo largo de la historia de forma muy diversa, respondiendo en cada caso a la configuración de la sociedad en la que se plantea y a la posición que ésta adopta

El derecho, obedeciendo a su carácter dinámico, no puede permanecer ajeno al cambio tecnológico, éste debe ser capaz de crear mecanismos necesarios para regular adecuadamente las actuales relaciones surgidas del uso de las nuevas tecnologías de la información. Resulta indudable que la aplicación de la informática en la sociedad origina nuevas relaciones jurídicas, lo que nos con llevaría a una necesaria elaboración de respuestas adecuadas desde el ámbito del derecho, lo que produciría, una importante transformación en el orden jurídico tradicional, haciéndose necesaria una adecuada construcción de normas y principios teóricos que respondan a las necesidades reales que nuestro tiempo impone,  dirigiéndose hacia la concentración de un sistema de disposiciones legales.

Con respecto a las cuestiones jurídicas que se suscitan de la globalización del comercio electrónico, es de destacar la perdida de control real de los estados nacionales ya que este tipo de comercio no se limita a ser aplicado dentro de un sólo Estado. Es así que de establecerse regulaciones nacionales diferentes se perderían las virtudes y ventajas de la generalización del sistema. Dicho de otro modo, estas fórmulas de comunicación informática, en toda su plenitud y con muy diferentes localizaciones territoriales, son esencialmente incompatibles con las tradicionales regulaciones nacionales vinculadas por el principio de territorialidad de las leyes.

La alternativa jurídica lógica es evidentemente el recurso al derecho internacional para establecer la ordenación del sistema y resolver los conflictos que se suscitan, lo que plantea no pocas dificultades, derivadas de la extensión de los sistemas y el elevado número de países que deben intervenir en ello.

Sin embargo, la tendencia que se observa en estos momentos es la alternativa de la desregulación[xii] o el establecimiento de las reglas jurídicas mínimas e imprescindibles, dejando que la extensión del fenómeno evolucione por sí misma y, en definitiva se autorregule, como de hecho y en la práctica ha venido sucediendo en los primeros estadios y etapas del sistema[xiii].

 

4.      La brecha digital:

La brecha digital puede ser definida como el punto de separación que existe entre las sociedades que utilizan las TIC en forma cotidiana  mejorando así su calidad de vida y las sociedades que no tiene acceso a esta clase de tecnología o aunque las tengan no saben como utilizarlas, encontrándose por ende en desventaja frente a las otros, no pudiendo acceder a la información,  ni alcanzar el conocimiento.

La brecha digital se produce a causa de muchos factores: poder adquisitivo, alto coste de la tecnología, precio de los ordenadores, pago del suministro de Internet,  alto coste del software, coste de la educación o formación para la aplicación de los programas. 

Pero definitivamente esta desigualdad o diferencia entre estas dos realidades separadas por la brecha digital,  no es puramente de índole tecnológica sino esencialmente económica y social. Siendo en parte y a nuestro entender uno de los factores de las desigualdades sociales, las que no hacen posible una justa competencia entre los hombres.

Lamentablemente esta brecha se encuentra entre los países industrializados con mayor poderío económico y los países en vías de desarrollo que por lo contrario carecen de recursos suficientes para el desarrollo de las tecnologías. Asimismo, adicionalmente a la brecha digital entre naciones de índole económica, existe también una brecha social, entre los sectores de medios urbanos y el resto de la población rural que no cuenta con acceso a las TICs.

En el caso de Latinoamérica la incorporación de la tecnología a la vida humana no ha sido todavía expandida y generalizada. Aun  es poco el número de personas que cuentan con una computadora, y quienes además cuenten con la conexión a Internet es mucho menor. Es por ello que el acceso al Internet aún es muy restringido, aunque existen mecanismos como las llamadas cabinas de Internet que facilitan el ingreso a la nueva tecnología.

Pero en definitiva la brecha digital de Latinoamérica, respecto de los países industrializados, es bastante amplia, siendo necesario para acortarla dicha brecha la participación tanto de los sectores públicos como privados, desarrollando  políticas educativas y de crecimiento endogámicas, basando el nuevo desarrollo tecnológico en el incentivo de la conectividad en un marco de convergencia tecnológica, como base sobre la cual desarrollar los ideales de conocimiento e innovación, con ventajas comparativas dinámicas, alta inversión, mercados transparentes y consumidores informados.

 

5.      Políticas en torno a la sociedad de la información

Las políticas en torno a la sociedad de la información, se han desarrollado de la mano de la globalización, cuya principal meta ha sido acelerar la instauración de un mercado mundial abierto, sin fronteras y  autoregulado.

Dichas Políticas, cuentan con la estrecha colaboración de organismos internacionales como la Organización Mundial del Comercio (OMC), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, y van dirigidas a que los países débiles abandonen las regulaciones nacionales o medidas proteccionistas que "desalentarían" la inversión.

Uno de los primeros pasos para alcanzar una política global sobre la sociedad de la información fue dada por  la Unión Europea (UE) la cual se fue plasmada en el Libro Blanco titulado "Crecimiento, competitividad y empleo" de 1993 donde se destacaba la importancia fundamental de la sociedad de la información para el crecimiento económico, la competitividad, la creación de empleo y una mayor calidad de vida para los europeos.

Igualmente en julio de 1996  la Comisión europea,  adoptó un Libro Verde titulado "Vivir y trabajar en la sociedad de la información: prioridad para las personas" donde se reitera la importancia del desarrollo de  la Sociedad de la información y formula diversas preocupaciones en torno a ella, las cuales pueden resumirse en dos, la primera referida al empleo, creación de nuevos modos o formas de trabajo el teletrabajo y la interrogante de que si estas nuevas tecnologías disminuirán la oferta laboral. La segunda interrogante se refiere a la democracia y a la igualdad: la complejidad y el coste de las nuevas tecnologías, pueden convertirse en una fuente de desequilibrios entre las zonas industrializadas y las menos desarrolladas, entre los jóvenes y los viejos, entre los que poseen la información y aquellos que no tiene acceso a ella.

Señala además que para dar respuesta a estas preocupaciones necesitamos unas políticas públicas capaces de ayudarnos a sacar fruto del progreso tecnológico y de asegurar el acceso equitativo a la sociedad de la información y la distribución justa del potencial de prosperidad

En 1999 surge por parte de la UE una iniciativa política llamada "eEurope - Una Sociedad de la información para todos" dirigida a asegurar que la Unión Europea obtenga el máximo provecho de los cambios que está produciendo la sociedad de la información, dicha iniciativa fue plasmada en el plan de acción,  "eEurope 2002 - Impacto y prioridades", pensada para convertir a la Unión Europea en la economía del conocimiento más dinámica y competitiva del mundo de aquí a 2010. Le sigue el plan de acción eEurope 2005, aprobado por el Consejo Europeo de Sevilla en junio de 2002, orientado sobre todo hacia la extensión de la conectividad a Internet en Europa. Asimismo, pretende traducir esta conectividad en un aumento de la productividad económica y una mejora de la calidad y la accesibilidad de los servicios en favor del conjunto de los ciudadanos europeos, basándose en una infraestructura de banda ancha segura y disponible para la mayoría. Una Nueva politica integrada de la UE, que sucede a las otras, la constituye la Estrategia "i2010 Una sociedad de la información europea para el crecimiento y el empleo" que trabajará por un enfoque integrado de las políticas de sociedad de la información y medios audiovisuales en la UE, y siendo su objetivo particular, fomentar el conocimiento y la innovación al objeto de fomentar el crecimiento y la creación de empleo, tanto cualitativa como cuantitativamente[xiv].

Por su parte, las Naciones Unidas junto a la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) conciente de la desigualdad en el acceso a los recursos informáticos, la necesidad de disponer de infraestructuras para asegurar la integración, el acceso a la información y la formación de las personas en un entorno adecuado, inicio un movimiento de concientización entre los países miembros. Este largo y complejo proceso se inició el diciembre 2003, con la celebración en Ginebra de la primera Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información. El reto consiste en aprovechar el enorme potencial de las TIC para facilitar el desarrollo y fomento del uso de la información con el objetivo de reducir la brecha digital de aquí al año 2015 y promover las metas de la Declaración del Milenio, adoptada tres años antes por los principales lideres del mundo. El primer balance de este proceso, se termino  de evaluar en la segunda fase de la Cumbre realizada en noviembre  del 2005 en Túnez con la participación de 175 países. Los resultados del encuentro han permitido reiterar este importante compromiso, con la toma de conciencia de las ventajas que el uso de las TIC pueden aportar a la humanidad y en particular a los países con economías menos favorecidas, enfatizando en la creación de contenidos mediante la utilización, tanto del software propietario como el de código abierto, principalmente para programas educativos, científicos y de inclusión digital.

Adicionalmente, en esta cumbre se  estableció al 17 de mayo de cada año como el día mundial de la sociedad de la información,  con el fin de llamar la atención mundial sobre la importante labor de las comunicaciones en la construcción de una sociedad global, abierta, inclusiva, centrada en las personas y basada en los conocimientos, como elemento clave del desarrollo

6. Conclusiones

Es indudable que nos encontramos en una época de cambios; cambios que vienen de la mano con los adelantos tecnológicos, que se suscitan especialmente en el mundo de la informática y que se van expandiendo a todos las actividades realizadas por el hombre, principalmente la comunicación y el comercio. Cambios de una notable trascendencia y alcance global, que nos permiten acortar distancias, compartir la información y crear conocimiento.

Pero en definitiva estos cambios no caminan solos, ya que es menester de las instituciones, organizaciones y de la propia sociedad hacer que estos instrumentos tecnológicos sean el medio para el desarrollo y el progreso de los países  y no un obstáculo para los mismos.

Hay que tener presente que nos encontramos en la era del poder del conocimiento dentro de la llamada sociedad de la información, en donde el hombre es el protagonista de su éxito y donde el uso de las herramientas informáticas se convierte en una necesidad, para una mejor calidad de vida tanto individual y colectiva, y donde ya no basta con saber leer o escribir, sino ahora es menester de todos saber usar  y aplicar la TI en nuestra vida cotidiana, aprovechando sus beneficios.



(*) Doctoranda de derecho Universidad de Navarra

[i] peña valenzuela, Daniel, burgos puyo, Andrea, castro pinzón, Adriana: "Contratación electrónica: ¿Es necesaria una convención Internacional?" en: hpp://www.emercatoria.edu.co/edicion_actual.htm#para%20que%20una%20convención%20sobre%20la%20contratación%20electrónica

[ii] climent babera, Juan: Derecho y Nuevas Tecnologías, Univ. Cardenal Herrera - Fundación Universitaria San Pablo, Valencia, 2001, pág. 9.

[iii] El uso del termino "sociedad de la información" data del año 1973, cuando el  sociólogo estadounidense Daniel Bell utilizo dicha expresión en su libro El advenimiento de la sociedad post-industrial, donde formula que el eje principal de ésta será el conocimiento teórico y advierte que los servicios basados en el conocimiento habrían de convertirse en la estructura central de la nueva economía y de una sociedad apuntalada en la información.

[iv] Se debe tener en cuenta que el concepto de "sociedad de la información", ha nacido bajo los preceptos de la globalización, sobreentiende que, en adelante, serán las "revoluciones tecnológicas", las que determinen el rumbo del desarrollo

[v] Las herramientas informáticas conforman la base del comercio electrónico y la contratación electrónica y están  conformadas por: las redes de ordenadores, que son los medios físicos por los cuales se transmite la información entre ordenadores. Una red de ordenadores es un conjunto de ordenadores interconectados de algún modo que permite el flujo de información entre los mismos, pero para que se produzca la comunicación entre ordenadores no se requiere, únicamente la existencia de una red, sino lo que hace posible el funcionamiento de estas, (intercambio de información entre ordenadores) es que estos contengan un mismo protocolo. El protocolo de comunicación TCP/IP, Transmisión Control Protocol/Internet Protocol, es el principal lenguaje de comunicación en la red, es un sistema de protocolos usado para el sistema de redes de área ancha (redes WAN), su éxito y difusión han dado lugar al auge de Internet, podríamos decir que Internet es un "sistema de redes de computadoras enlazadas, con alcance mundial y de continuo crecimiento, que facilita los servicios de transmisión de datos. El surgimiento de Internet hubiera sido irrelevante si no contara con múltiples aplicaciones que hacen de ella una herramienta tecnológica informática necesaria como son: La word wide web, conocida por la telaraña mundial o WWW, podríamos definir a la World Wide Web como el sistema mundial de hipertexto que utiliza a Internet como mecanismo de transporte, donde el usuario navega con sólo dar clicks en vínculos, lo que hace que aparezca en pantalla otro documento (que también contiene vínculos). El correo electrónico, el cual permite al usuario enviar y recibir mensajes, que igual que la Web puede almacenar e imprimir, los contenidos que transmiten bajo este sistema suelen presentarse en forma de texto, y se suelen acompañar muchas veces de ficheros de toda clase incluso multimedia. El Chat que es un sistema que permite conversaciones entre dos o más usuarios en tiempo real. La idea básica es que lo que se escribe con el teclado aparece en la pantalla de los demás usuarios.

[vi] Castells, Manuel: La Era de la Información: Economía, Sociedad y Cultura: La sociedad Red, México, Siglo XXI, 1999, pág 47.

[vii] Gomez Segade, José: "El Comercio Electrónico en la Sociedad de la Información" en: GOMEZ SEGADE, José (Dir): Comercio electrónico en Internet, Marcial Pons, Madrid, 2001, pág.22.

[viii] Moro Almaraz, Mª Jesús: "Servicios de la sociedad e la información y sujetos intervinientes", en: MORO ALMARAZ, Mª Jesús (Dir.): Autores consumidores y comercio electrónico, COLEX, Madrid, 2004, pág. 108-109

[ix] Lopez-Monis Gallego, Mónica: "Ámbito de aplicación de la nueva Ley de Servicios de la Sociedad de la Información y el comercio electrónico" en: MATEU DE ROS, Rafael y Lopez-Monis Gallego, Mónica (Coords.): Derecho de Internet: la ley de servicios de la sociedad e la información y el comercio electrónico, Thomson-Aranzadi, Navarra, 2003, pág. 28

[x] Guisado Moreno, Ángela: La formación y perfección del contrato en Internet, Marcial Pons, Madrid, 2004. Pág. 46.

[xi] La legislación española, en ley 34/2002, de 11 de julio, de servicios de la sociedad de la información y de comercio electrónico define en su anexo "A" al "servicio de la sociedad de la información" o "servicios": como todo servicio prestado normalmente a título oneroso, a distancia, por vía electrónica y a petición individual del destinatario. Asimismo para la ley el concepto de servicio de la sociedad de la información comprende también los servicios no remunerados por sus destinatarios, en la medida en que constituyan una actividad económica para el prestador de servicios.  Cabe aclarar, tal como lo señala Guisado Moreno, que no existe una equivalencia en términos absolutos entre servicios de la sociedad de la información y comercio electrónico, toda vez que los primeros se corresponden con una realidad más amplia que la del puro comercio electrónico que, por definición, va a implicar un intercambio concertado y eventualmente ejecutado a través de medios electrónicos. Guisado Moreno, Ángela: op. cit. Pág.55.

 

[xii] Un argumento a favor de la autorregulación o desregulación, es que las leyes no pueden coordinar todas las conductas de una sociedad, es por eso que debemos dejar que sean los propios individuos que la conforman, los que autorregulen sus transacciones en base a un derecho contractual general

[xiii] CLIMENT BABERA, Juan: op. cit. pag.37

[xiv] http://europa.eu/scadplus/leg/es/s21012.htm

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